Todo el que tiene algún dinero, le busca sacarle una buena rentabilidad a corto, medio y largo plazo.
Algunos muy ambiciosos y un tanto inexpertos quieren conseguir en poco tiempo una rentabilidad engañosa, porque caen en el timo de la estampita, ignorando que nadie da duros a peseta.
Los hay más prudentes y menos ambiciosos y se conforman con una rentabilidad normal y a medio plazo.
Los que tienen dinero suficiente para ir viviendo desahogadamente y quieren tener asegurada su vejez, invierten a largo plazo, que es cuando lo van a necesitar.
Todo esto en cuanto se refiere a la parte material de la vida.
Existe otra rentabilidad personal a intransferible que se puede adquirir o perder.
“El que siembra vientos, recoge tempestades” “El que mal anda, mal acaba” “El que la hace, la paga” “A un mentiroso, se le coge antes que a un cojo” “El que engaña, será engañado tarde o temprano.”
A todos estos y a muchos más, a quienes se le podría aplicar aquello de que “El que mal anda, mal acaba” porque han escogido un camino equivocado, creyendo que van a conseguir mayor rendimiento con sus malas artes.
Un mentiroso, injusto, calumniador, vengativo o ladrón, puede que consiga a muy corto plazo cierta rentabilidad personal.
Rentabilidad, que “como la escopeta, la carga el diablo” porque tarde o temprano, aún aquí en este mundo, a corto o medio plazo, le pasará factura y no digamos al final.
Existen muchos que no se estiman malas personas porque ciegos por los odios, las envidias, y otras pasiones inconfesables, se creen con el derecho de mentir, engañar y robar, en la creencia de que ellos han sido tratados injustamente. “Cree el ladrón que todos son de su condición.”
Por suerte existen otros muchos que al buscar la más alta y segura rentabilidad, aun en este mundo, optan por ser buenos CATÓLICOS con todas sus consecuencias porque saben que están INVIRTIENDO en el FONDO de Dios que no puede fallar y es el más RENTABLE eternamente.
miércoles, 16 de junio de 2010
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2 comentarios:
Por su gracia y por su amor ahi mismo es donde estoy invirtiendo, en el FONDO DE DIOS, rentable eternamente y no falla. Gracias y el Señor lo guarde
Mi estimada Berta, me alegra infinito que sepa donde tiene que invertir. ¡Ojala lo hicieran muchos más!! Un cariñoso saludo.
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