miércoles, 25 de enero de 2012

Dios TIRA la piedra y ESCONDE la mano

El tirar la piedra y esconder la mano es lo que mejor se nos da.

Lanzamos al aire una calumnia que descalabra a un inocente sin que pueda saber quién se la ha tirado para poder defenderse; pero ahí queda eso.

Dios continuamente nos está tirando piedras; y no para descalabramos, sino como buen pastor para conducirnos por el buen camino, puesto que somos como borregos.

Cuando algún problema, contratiempo o adversidad nos hiere como una buena pedrada, le echamos la culpa a Dios creyendo que no nos ama, o pensamos y decimos que no es posible que Dios exista si permite tales males.

Cuando nuestra vida marcha viento en popa y todo nos sale a pedir de boca, nos creemos merecedores por nuestro trabajo, por nuestra cara bonita, a lo más, por nuestra buena suerte; pero muy pocas veces porque Dios así lo ha dispuesto sin merecimiento alguno y no nos sentimos agradecidos ni obligados. Así vamos por la vida.

¿Por qué Dios no da la cara ni en las duras ni en las maduras?

Porque si nos lo dijera ABIERTAMENTE ¿Dónde quedaría nuestra FE?

Dios ha querido que nuestra FE tenga mas poder que el SUYO.

“Mientras hablaba Jesús a la multitud, llegó un jefe, y acercándose se postró ante ÉL diciendo: Mi hija acaba de morir; pero ven, pon tu mano sobre ella y vivirá.

Levantándose Jesús, le siguió con sus discípulos. Entonces una mujer que padecía flujo de sangre hacía doce años se le acercó por detrás y LE tocó la orla del vestido, diciendo para sí misma:

Con sólo que toque su vestido seré sana.

Jesús se volvió, y, viéndola dijo:

Hija, ten confianza TU FE te ha SANADO.

Y quedó sana la mujer desde aquel momento".(Mt.9)

Aquí como en otras muchas curaciones queda bien claro que no dijo: Mi PODER o el de mi Padre te ha curado, sino TU FE te ha SANADO.

Por lo tanto CREAMOS sin vacilaciones, aunque tengamos que soportar las dudas, que cuando Dios, que es nuestro PADRE, nos apedree siempre será parea nuestro bien.

Y cuando en lugar de piedras nos inunde de bienes, seamos, al menos, AGRADECIDOS besando esa mano desconocida.

2 comentarios:

rox dijo...

muy buena su reflexion, si me permite copiarla en facebook, pondré el enlace de su blog para que lo visiten

Roque Pérez dijo...

Muchas gracias estimada Nerlyng por haberme visitado y estoy encantado de que copie mi artículo en su facebook.
Tenga en cuenta que mis artículos son botellas que lanzo al mar de Internet por si le aprovecha a los muchos náufragos espirituales.
Un saludo.