Un Hecho no explicable por las LEYES NATURALES y que se atribuye a intervención SOBRENATURAL de origen divino es un MILAGRO.
Cuando un paciente que sufre una enfermedad certificada INCURABLE por varios médicos y que, de pronto, por las peticiones propias del enfermo o familiares a Dios o al Santo de su devoción, se CURA, es porque se ha producido un MILAGRO.
El Evangelio está plagado de CURACIONES milagrosas y hasta de muertos RESUCITADOS.
Existe otra clase de MILAGROS que llamaría VIVIENTES porque se han dado, se dan y se seguirán dando en personas en la que sus VIDAS son un PURO MILAGRO.
¿Se explica por LEY NATURAL que en tiempo de las primeras persecuciones romana, los cristianos SOPORTARAN, hasta con alegría ser DEVORADOS vivos por las fieras si no hubiera sido por una intervención de origen DIVINO?
Mi amigo y paisano Manuel Lozano Garrido (LOLO) que nació el 9 de Agosto de 1.920 en Linares (Jaén) que comenzó a desarrollar su trabajo profesional de periodista, contrajo en 1.942 una grave enfermedad (espendolitis) que le deformó por completo el cuerpo y lo dejó durante 28 años sujeto a una silla de ruedas. Murió el 3 de Noviembre de 1.971 y ha sido BEATIFICADO el 14 de Junio del 2010.
El doctor Pulpillo decía que Lolo sufría constantemente, su dolor era semejante como aquel que tuviera clavado alfileres en todos los poros de la piel, rozarle con la mano era un suplicio, también tenía dos cálculos renales enormes que debían causarle grandes dolores. No obstante era un hombre ALEGRE. Alegría que transmitía a sus visitantes.
A pesar de su invalidez, dolores y ceguera escribió nueve libros y miles de artículos.
Laín Entralgo, después de haber leído una obra de Lolo exclamó:
“En la vida no hay más que dos extremos: El SUICIDIO o la SANTIDAD. Lolo ha escogido la mejor parte, la HEROICIDAD, estúpida aparentemente; pero verdadera en su insuperable fondo.”
Toda nuestra vida desde que nacemos hasta que morimos es un Milagro continuado.
¿Quién no se ha sentido metido en un mar de dificultades, angustias o tragedias que le ahogaban y de pronto ha encontrado una tabla de salvación? ¡¡Ha sido un MILAGRO!!
Si para que se produzca un milagro tienen que darse antes unos acontecimientos DOLOROSOS.
La vida de Jesucristo desde que nació en un PESEBRE y murió en una CRUZ fue un MILAGRO que sobrepasó todas las LEYES naturales, Divinas o DESCONOCIDAS.
Y el que RESUCITARA y se quedara con nosotros en la EUCARISTÍA es el MILAGRO que sólo hay una ley que lo pueda explicar: SU AMOR INFINITO hacia nosotros.
Cuando un paciente que sufre una enfermedad certificada INCURABLE por varios médicos y que, de pronto, por las peticiones propias del enfermo o familiares a Dios o al Santo de su devoción, se CURA, es porque se ha producido un MILAGRO.
El Evangelio está plagado de CURACIONES milagrosas y hasta de muertos RESUCITADOS.
Existe otra clase de MILAGROS que llamaría VIVIENTES porque se han dado, se dan y se seguirán dando en personas en la que sus VIDAS son un PURO MILAGRO.
¿Se explica por LEY NATURAL que en tiempo de las primeras persecuciones romana, los cristianos SOPORTARAN, hasta con alegría ser DEVORADOS vivos por las fieras si no hubiera sido por una intervención de origen DIVINO?
Mi amigo y paisano Manuel Lozano Garrido (LOLO) que nació el 9 de Agosto de 1.920 en Linares (Jaén) que comenzó a desarrollar su trabajo profesional de periodista, contrajo en 1.942 una grave enfermedad (espendolitis) que le deformó por completo el cuerpo y lo dejó durante 28 años sujeto a una silla de ruedas. Murió el 3 de Noviembre de 1.971 y ha sido BEATIFICADO el 14 de Junio del 2010.
El doctor Pulpillo decía que Lolo sufría constantemente, su dolor era semejante como aquel que tuviera clavado alfileres en todos los poros de la piel, rozarle con la mano era un suplicio, también tenía dos cálculos renales enormes que debían causarle grandes dolores. No obstante era un hombre ALEGRE. Alegría que transmitía a sus visitantes.
A pesar de su invalidez, dolores y ceguera escribió nueve libros y miles de artículos.
Laín Entralgo, después de haber leído una obra de Lolo exclamó:
“En la vida no hay más que dos extremos: El SUICIDIO o la SANTIDAD. Lolo ha escogido la mejor parte, la HEROICIDAD, estúpida aparentemente; pero verdadera en su insuperable fondo.”
Toda nuestra vida desde que nacemos hasta que morimos es un Milagro continuado.
¿Quién no se ha sentido metido en un mar de dificultades, angustias o tragedias que le ahogaban y de pronto ha encontrado una tabla de salvación? ¡¡Ha sido un MILAGRO!!
Si para que se produzca un milagro tienen que darse antes unos acontecimientos DOLOROSOS.
La vida de Jesucristo desde que nació en un PESEBRE y murió en una CRUZ fue un MILAGRO que sobrepasó todas las LEYES naturales, Divinas o DESCONOCIDAS.
Y el que RESUCITARA y se quedara con nosotros en la EUCARISTÍA es el MILAGRO que sólo hay una ley que lo pueda explicar: SU AMOR INFINITO hacia nosotros.
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