viernes, 21 de agosto de 2015

¿ESTÁ NUESTRA JUVENTUD DECADENTE E INDISCIPLINADA?


     En un texto caldeo grabado en piedra hacia el año dos mil antes de Cristo, se dice lo siguiente:

“Nuestra juventud es decadente e indisciplinada. Los hijos no respetan ni escuchan ya los consejos de sus mayores. El fin de los tiempos está cerca”

Y ciertamente fue profético, porque realmente con la venida de Cristo, empezó a desaparecer el paganismo y surgió el cristianismo, principio y raíz de todo progreso material y espiritual.

Ahora por una equivocada, partidista, interesada y prolongada educación sin principios éticos, morales, religiosos y sin exigir disciplina y esfuerzo porque eso no le gusta a la mayoría  que siempre protesta y es la que da votos, estamos en manos de algunos que dicen:” Comamos y bebamos que mañana moriremos” como antaño, por lo tanto de progreso, nada.

Aunque parezca contradictorio, el progreso un tanto desmelenado en el que estamos sumergido, véase Internet con sus múltiples aplicaciones, nos estamos olvidando de la buena educación, siendo el tuteo, los malos modales, la vestimenta descuidada, como signo de identidad, de moda y, a veces señal de poder etc.etc. y todo esto y más se toma como si fuera lo más progresista.

Da la sensación de que unos  jóvenes y no tan jóvenes   desencantados, cabreados o deseando tener una ocupación y otros por motivos y razones inconfesables, se alistan a partidos emergentes con el deseo de gobernarnos sin formación ni experiencia.

¿No habrá alguien detrás de todos estos despropósitos que están cometiendo,  precisamente los que han emergido súbitamente para sacarnos de la miseria y nos están desprestigiando para hundirnos?

 Gracias a Dios, algunos, aunque pocos, voluntariamente soportan muchos años de estudio y vida sacrificada en lo mejor de sus vidas, y no para conseguir un trabajo muy remunerado, sino para dedicar toda su vida al SERVICIO DE DIOS Y DE LOS DEMÁS como curas rurales y a veces, con varias parroquias, por escasez, o marchándose a países lejanos, a sabiendas que podrán coger enfermedades mortales y que sobre todo que serán criticados, odiados, perseguidos y hasta martirizados, aquí y allá

         Y resulta que esas heroínas y héroes anónimos son los que posiblemente estén consiguiendo que Dios no nos destruya, dado lo canallas que somos, como lo tuvo que hacer con Sodoma porque no encontró ni DIEZ JUSTOS como se lo estaba implorando Abraham.


No hay comentarios: