Son palabras del famoso científico Stephen Hawking, que si
no tiene pruebas concluyentes de tal afirmación, no las debería haber
pronunciado, dada su fama y el daño espiritual que podría hacer.
Ningún juez podría ni
debería condenar a un inocente sin PRUEBAS concluyentes y ante la duda, habría
que aplicarle el “In dubio pro reo” o sea ante la duda, no se le podría
condenar.
Espero que Hawking y todos los que públicamente digan que
Dios no existe tengan pruebas concluyentes y no puras teorías interesadas
porque estarían CONDENANDO a Jesucristo de quien hay pruebas históricas más que
razonables de su existencia y de su poder como Dios y no se le aplicaría ni si
quiera el “In dubio pro reo”.
Yo humildemente puedo afirmar que tengo pruebas de que para
mí, DIOS EXISTE, por las tres veces en
las que aunque no LO he visto, pero LO he SENTIDO, como tengo publicado el 7 de Marzo
del 2.010 “Yo no he visto a Dios; pero creo que lo he sentido”
Bien claro Jesucristo dijo:
“Yo te alabo, Padre, Señor del Cielo y de la tierra, porque
ocultaste estas cosas a los sabios y entendidos y las revelaste a los humildes
y sencillos, si, Padre porque así te plugo”
Dada la categoría de todos aquellos que digan y propaguen
tal afirmación sin pruebas concluyentes deberían conocer lo que Jesucristo
dijo:
“Al que escandalizare a uno de estos pequeñuelos que CREEN
en mí, más les valdría que le colgasen al cuello una piedra de molino y le hundieran
en el fondo del mar.
¡Ay
del mundo por lo escándalos! Porque no puede menos de haber escándalos; pero ¡ay
de aquel por quien viniere el ESCÁNDALO!”
Dios quiera que los que públicamente dicen que DIOS NO EXISTE porque
son ateos, no busquen ESCANDALIZAR en los siguientes sentidos que le da la Real Academia de la Lengua Española :
“Palabra que es causa de que alguien obre mal o piense mal”
“Ruina espiritual o pecado en que cae el prójimo por ocasión
del dicho o hecho”
Porque si esos tales sostiene categóricamente y sin pruebas
que Dios no existe, y por lo tanto tampoco han existido Jesucristo, como Dios,
ni la Virgen
ni los santos y el estudiar religión no serviría de nada y la gente buena y
sencilla, se lo creyera porque lo dice alguien importante y famoso, se habrían
cargado de un plumazo todas las creencias arruinando toda espiritualidad. ¡¡Eso
sí que sería un cambio!!
Pero sepan o recuerden cómo han terminado los muchos que han
intentado hacer lo mismo.
Voltaire que, más o menos, dijo que Jesucristo necesitó doce apóstoles para
cambiar el mundo, cosa que haría él”
Y aunque más tarde
también dijo:
“Mientras todos los demás sabios no ejercían influencia ni
siquiera sobre la moral de la calle, en que vivían, el ejemplo de Jesucristo lo
ha transformado todo”
Pues Voltaire, casi maullando y desesperado porque
habiendo pedido un sacerdote, se lo habían impedido sus amigos, murió en casa
de la marquesa de Villete que así lo cuenta
El
día 3 de este mes publique aquí un articulo: ¿Quiénes son los Milagros
Vivientes? sobre la vida de un íntimo amigo, Manuel Lozano Garrrido, LOLO Para
los amigos, que a los 22 años contrajo una enfermedad (espendolitis) que le
deformó el cuerpo y le dejó inválido y durante 28 años sujeto a una silla de
ruedas completamente ciego en los 10 últimos años de su vida y publicó nueve
libros y miles de artículos.
A un médico amigo suyo que estaba enfermo, le dijo:
“El porvenir no es tuyo, ni de los médicos, sino de Dios. A
ti sólo te toca la hora por la que pasas. Vívela con ilusión y fecúndela
intensamente, Cárgala de esperanza, siémbrala de amor”
Laín Entralgo, después de haber leído una obra de mi amigo
exclamó:
“En la vida no hay más que dos extremos: El suicidio o la
santidad. Lolo escogió la mejor parte, la Heroicidad estúpida aparentemente; pero verdadera
en su insuperable fondo”
Por eso mi amigo LOLO fue declarado BEATO el 12 de Junio del
2.010
Me atrevería a decir que entre el Suicidio y la Santidad de la que habla
Laín Entralgo existen dos clases de Suicidios y dos de Heroícidades
La de aquellos que teniéndolo todo y disfrutado a tope y al
sentirse vacíos y sin esperar nada más, cortan por lo sano como lo hizo
Cristina Onassis, que antes de suicidarse dijo: “Soy tan pobre tan pobre que
sólo tengo dinero,
La
de todos aquellos que no sólo están abrumados, angustiados, desesperados por toda clase de calamidades, sino también
creyendo que toda la culpa de sus males la tiene Dios, dicen, a modo de reproche
y desahogo que Dios no existe y mueren desesperados.
Héroes y Santos como mi amigo LOLO los
hay, y gracias a Dios los seguirá habiendo.
También hay muchos que sin haber llegado a la Santidad , caen, se
levantan, luchan contra viento y marea y a trancas y barrancas, cargados con
toda clase de problemas, y teniendo que pisar el lodo de este mundo, viven
resignados aceptando que es la voluntad de Dios, porque esperan entrar tarde o temprano en la
CASA DEL PADRE.
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