¿POR QUÉ AUN TENIENDO FE NO CREEMOS?

            

         Porque tener FE es un concepto, algo INVISIBLE y CREER es poner en PRÁCTICA esa FE.

         ¿De qué nos sirve tener un magnífico coche y no lo usamos porque no nos hemos molestado en aprender su manejo y andamos aperreados?

         Esto es lo que les puede suceder a los que se llaman CREYENTES, no PRACTICANTES.

         Los Creyentes que han tenido la suerte de recibir el DON de la FE y por lo tanto saben que DIOS EXISTE  y que después de la muerte, nos las tendremos que ver con ÉL para un ajuste de cuentas,

         Y CREEN en los médicos, abogados, profesores, pilotos, maquinitas, taxistas, previo pago de su importe por los servicios prestados y de los CURAS, ni escucharlos, dando sus servicios gratuitamente.

         Sepan que los curas que han estudiado una carrera bastante larga, sacrificando lo mejor de su vida los jóvenes y no para después disfrutar de un buen sueldo, sino por AMOR A DIOS y a los DEMÁS, porque si fuera como dicen “Vives como un cura” los seminarios estarían a tope.

         Después  se limitan a ENSEÑARNOS y jamás obligarnos a caminar como Dios manda para ser felices, aun en este mundo, y luego la VIDA ETERNA.

         Lo triste e injusto es que teniendo FE en todo ello, porque es verdad y razonable, no se lo CREEN porque no lo ponen en práctica.

Y así ni se casan por la Iglesia,  ni Bautizas a sus hijos, ni se preocupan de que sean formados en el Santo Temor de Dios, que es el Principio de la Sabiduría para que sean buenos estudiantes, honrados trabajadores, no caer en los vicios etc,etc.

No pisan una Iglesia en donde, no es el cura, es el mismísimo Dios, Jesucristo quien le espera en la Eucaristía para darle un abrazo si se dejan y sean capaces de decir: Protegeme Dios mío, que me refugio en TI.

Yo puedo jurar  que varias veces “Yo no he VISTO a Dios; pero CREO que LO he sentido” como cuento en mi artículo publicado el 7 de Marzo del 2012 y también LE hice una promesa y me escuchó, porque me cogió la palabra, como también cuento.