Aunque sería la pregunta más contradictoria por tratarse de Dios que teniéndolo todo, podría hasta exigirnos todo cuanto nos ha dado, que es todo, se limita a pedirnos el amor sabiendo que es lo único nuestro y que el amor ni se compra ni se vende, ni se impone, se DA.
Como Dios esencialmente es AMOR y que todo cuanto existe y a nosotros, su obra maestra, ha sido creado por AMOR, no puede darnos algo tan íntimo y suyo como es el amor si no es a cambio de nuestro AMOR.
No en vano decimos Amor con Amor se paga.
Y Si el amor consiste en dar, por
aquello de que obras son amores y no buenas razones,
Dios nos amó tanto que nos dio a su
unigénito Hijo para que al convivir con nosotros y para que por aquello de que con el roce surgiera ese
amor mutuo.
Jesucristo está presente en
la Eucaristía, camina a nuestro lado y sigue siendo
ignorado y por lo tanto su roce sería como rozarse con un poste, que eso es lo que, a veces, somos nosotros.
ignorado y por lo tanto su roce sería como rozarse con un poste, que eso es lo que, a veces, somos nosotros.
El amor a Dios, como amor, sólo se
puede dar en la intimidad y de TÚ a tú. para decirle, no treintas veces tres, sino setentas veces tres, lo de San Padro: ante cualquier error voluntario o involutario: podamos decir: Señor, TÚ que lo sabes todo, TÚ sabes que te amo
Y cuando con ese amor podamos decir como San Pablo.
Vivo yo, ya no soy yo es Cristo
quien vive en mí
Y Mi vivir en Cristo
Y deseo morir para estar con Cristo.
El día que, al menos, tengamos tales
deseos, sabremos lo que es AMAR A DIOS y SER AMADO.
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