viernes, 16 de julio de 2010

¿Por qué nacemos FELÍZMENTE CONDENADOS?

Esto que parece una manifiesta contradicción, (un condenado, no puede ser feliz) es una gozosa y triste realidad.

Nacemos condenados a una vida feliz o desgraciada y en muchas ocasiones nos condenamos para ser felices.

Al enamorarse de alguien, ya se está encadenando felizmente.

El drogadicto se condena para disfrutar

Los que forman una pareja y tienen hijos, se condenan gozosos entre ellos y cuidan de sus hijos.

Los hijos quedan encadenados a sus padres y son felices.

El que encuentra un empleo, se esclaviza y se siente feliz porque ha conseguido el trabajo tan deseado.

La misma tierra está condenada a depender del Sol, del aire, de las lluvias, y sólo se siente feliz dando sus frutos.

¿Por qué sucede todo esto?

Si una imagen vale más que mil palabras, al comprobar cómo nos condenamos voluntariamente a una felicidad o infelicidad, nos está diciendo que si venimos a este mundo es para morir CONDENADOS a una vida FELIZ o INFELIZ, eternamente y en gran parte depende de nosotros.

No hay comentarios: