Allá por el año 1.935 o comienzo del 36 me cantaban mis compañeros de escuela pública la
siguiente cancioncilla
Arriba Lenin,
Abajo Burgués
Tendrá que vencer.
Alanti pómporo,
de la Rioja
de la Rioja
Bandera
Roja
la que triunfará.
La Bandera roja
la que triunfará
Arriba EL Comunismo
La Bandera roja
la que triunfará
Arriba EL Comunismo
Y la
Libertad
Arriba Lenin
Abajo Burgués
Tendrá que vencer.
Todos la cantaban, menos un protestante y yo que como
católico, no sólo no la cantaba, sino que hasta discutía con algunos, tan
tolerantes, como siempre, que un día al salir de clase me rodearon en una pared y me amenazaron si no la cantaba.
Mi madre me sacó del colegio sin acudir al maestro, sabiendo que era socialista y me quedé en casa porque ya era casi verano.
Y aunque jamás la canté, la tengo grabada y a mis 89 años la pueda recordar
Mi madre me sacó del colegio sin acudir al maestro, sabiendo que era socialista y me quedé en casa porque ya era casi verano.
Y aunque jamás la canté, la tengo grabada y a mis 89 años la pueda recordar
Resulta que uno de ellos, llamado León, mayor y más fuerte
que yo, fue mi pesadilla durante la guerra porque en cuanto me veía, corría
detrás de mí para pegarme, cosa, que gracias a Dios nunca consiguió; pero
cuando iba al cine, temía encontrármelo sin poder huir.
Terminada la guerra, yo me apunté a los Flechas de Falange y
un día en que estábamos encuadrados como soldados en el campo de fútbol me
encontré al tal León con la cabeza baja y sólo le dije: Hola León, sin más.
Dios quiera que no se tenga que repetir la Historia.
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