miércoles, 10 de noviembre de 2010

¿CUANDO ESTÁ DIOS CON CADA UNO Y EN TODO MOMENTO?

         
           Tengo entendido que en algunos regímenes totalitarios, ateos y anticlericales se les hacía esta pregunta a los niños en las escuelas, para que al no encontrarLO, quedaban vacunados contra toda creencia,

           Cuando me encuentro en medio del bullicio de coches, de ambulancias, de coches patrulla con sirenas, luces parpadeantes y de gente apresurada con caras de preocupación, me pregunto: ¿Dónde estará Dios en medio de este caos organizado?

         ¿Habrá alguno consciente de que Dios va a su lado, puesto que "En Dios somos, vivimos y nos movemos"?

        Aun en medio de esa ignorancia o inconsciencia, Dios está en nosotros, porque como nuestras VIDAS son parte esencial de Dios, donde haya vida allí, aunque invisible, está Dios porque no puede desprenderse de parte de su ESENCIA.

        El que tenga FE sepa que a Dios le sobra tiempo para caminar al lado de cada uno porque su invisibilidad se hace VISIBLE por la FE,

        Por lo tanto  ese tal, no caminará, sino que volará a ras de tierra sin que les angustie tanto torbellino respetando a todo el que camine a su lado, sabiendo que Dios también va con él.

       Pienso que al que no crea en Dios, dude, o no LO comprenda, no le vendría mal intentar buscarLO, que no es tan difícil y evitaría las terribles consecuencias cuando se enfrentara con ÉL, caso que exista, habiendo más argumentos y manifestaciones a SU favor que en contra.

      Como el oro, las piedras preciosas, el petróleo, el carbón etc, y en las frutas, lo bueno está oculto por la cáscara, así está Dios, que habrá que buscarlo con más trabajo y dedicación, si queremos disfrutar de Dios como lo hacemos con todo lo terrenal, con la diferencia ABISMAL de que lo de Dios, nos vale también TEMPORALMENTE y sobre todo ETERNAMENTE.

2 comentarios:

Francisco Espada dijo...

Oculto, pero visible para quien quiere verlo en cada cosa insignificante de la vida diaria. Él es el soplo mismo de la vida; por tanto, en cada una de las inspiraciones que hacemos, allí está Dios; cuando mañana por la mañana, si me lo concede, despierte, allí está Dios con un hermoso regalo... Como decía el catecismo de mi lejana primera comunión, en todas partes.

Roque Pérez dijo...

Muchas gracias, Sr.Espada por su comentario como colofón a mi artículo.