¿PARA QUÉ REZAR SI DIOS CONOCE NUESTRAS NECESIDADES?

         Esto es, por desgracia, lo que muchos  piensan creyendo que REZAR es solamente PEDIR.

¿A quien no le gustaría poder estar al habla con el Rey, con el Presidente del gobierno o un ministro, esperando y sabiendo  que le concederá lo que pida.

Pues el rezar no es ni más ni menos que el estar al habla con Dios

Pero si Dios ya, de antemano, sabe lo que necesitamos. ¿A qué molestarle con nuestra llamada?

¿Por qué cuando rezamos el  Padrenuestro decimos: Señor hágase tu voluntad y no pedimos que se haga la nuestra?

Si un mendigo no extiende su mano para pedir y las mantiene metidas en los bolsillos por comodidad y en la creencia  que los demás conocen sus necesidades, lo lleva claro.

Lo mismo les puede suceder a los que no se molestan en pedir porque Dios lo sabe todo y actúan como el mendigo

 A Dios hay que suplicarle con las manos extendidas y limpias dándole a entender así que aceptamos su voluntad creyendo y esperando que al final, será la nuestra la que se cumpla.

Confiar en Dios no es tener la SEGURIDAD y vivir tranquilo de que concederá lo pedido; pero se puede tener la CERTEZA de que será lo que nos conviene.

El sufrimiento que nos produzca la duda de que no sea así, será como el pequeño tributo que hay que pagar para conseguir lo deseado.

Rezar no es sólo para PEDIR ayuda, que ya se encargará Santa Bárbara de que truene para que lo hagamos.

Hoy 11 de Febrero, festividad de la Virgen de Lourdes, muchos enfermos acudirán al Santuario esperando el milagro, que rara vez se da y aunque vuelven con las mismas dolencias, casi todos confiensan volver alegres y cambiados por dentro ¡¡Por algo será!! 

REZAR es  querer y saber vivir PENSANDO en DIOS el mayor tiempo posieble. .