¿POR QUÉ DECIMOS A LA DE TRES VA LA VENCIDA?

             Porque siempre que estamos intentado resolver un problema, nos decimos un tanto cabreados, a la TERCERA va la vencida, ignorando  que lo estamos dejando en las manos de Dios que son UNO en Esencia y TRINO en Persona.  

            San Mateo cuenta que las catorce Generaciones de Cristo fueron TRES.

            Desde Abrahan  hasta David.

             Desde David hasta la cautividad de Babilonia 

             Y desde la cautividad hasta CRISTO

           Comprobaremos que el Misterioso y simbólico numero TRES lo tenemos en todas partes, como ESTÁ Dios. en quien SOMOS, VI VIMOS y NOS MOVEM0S

           El Dios Padre no hubiera  conseguido que su Hijo, siendo Dios, tomara nuestra Naturaleza, si la Santísima Virgen María no pronunciara: He AQUÍ la ESCLAVA del SEÑOR.

             Que fueran TRES Magos o sabios los primeros que visitaron al Niño Dios. ofreciéndole Oro, Incienso y Mirra.

             Que Jesús con doce años permitió que sus Padres lo tuvieran buscando durante  TRES días     

             TRES veces  El Dios Padre dijo que Jesucristo era su hijo predilecto y que lo Escucháramos. 

             Jesucristo se dejó tentar TRES veces por Satanás.

             Jesucristo nos ofreció  desde la CRUZ en el Gólgota las TRES VERDADES indiscutibles:

            Que Jesucristo, habiendo demostrado ser DIOS con Dichos y Hechos, se deja Crucificar como un malhechor, perdonando a quienes le crucifican.

            Que un LADRÓN arrepentido se convierta en el PRIMER Santo canonizado San Dimas.

            Y que otro Ladrón sea el PRIMER  Condenado.

             Jesucristo Resucitó al TERCER DÍA

             Entre nosotros, por el Amor de un Hombre y una  Mujer nazca un hijo, UNA Familia y TRES. Vidas  como Una TRINIDAD humanamente DIVINA.

               Cada UNO de nosotros, nacemos con Cabeza, Cuerpo y Extremidades y si queremos Vivir, tendremos que Tener FE, Esperanza y Amor.

                Jesucristo como Dios y Hombre verdadero, puede no  decirnos  Toda la VERDAD para nuestro  bien; pero jamás nos MENTIRA  ni ENGALLARÁ, cuando nos diga: 

               Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida 

               Aprended de MI que soy Manso y Humilde de Corazón

                El que Come mi Carne y bebe mi sangre, Mora en mi y Yo en él.

                Y Yo Estaré con Vosotros todos los, Días, hasta la consumación de los siglo