martes, 7 de octubre de 2014

¿PODRÍAMOS LLEGAR A SER COMO DIOS?

          Se cuenta que San Agustín paseando un día por la playa vio a un niño que estaba intentando meter el agua del mar en su hoyo en la arena y al preguntarle por qué hacía una cosa tan imposible, el niño, que posiblemente sería un Ángel, le respondió: Tan difícil es esto como el que Vd. pueda comprender el Misterio  de la Santísima Trinidad.

Efectivamente, no podemos comprender que Dios sea UNO en esencia y TRINO en persona.

Como tampoco podremos comprender que Dios no haya tenido PRINCIPIO, porque para ÉL no ha existido el tiempo ni el espacio ni podría tener FIN, aunque esto último lo podría realizar porque para ÉL no habría nada imposible.

Haciendo Teología-Ficción, se podría pensar que cuando Moisés preguntó que quién era el que le estaba hablando, no le dijo: Soy Dios, sino SOY EL QUE SOY, luego Dios sencillamente ES.

Podríamos pensar que Dios ha debido estar SOLO sin tiempo ni espacio millones y millones de años de los  nuestros.

En un momento de su inexistente tiempo crearía los Ángeles para que le sirvieran y le hicieran compañía libremente, cosa que no cumplió Luzbel y compañía porque posiblemente quisieron ser como Dios.

Si los famosos escritores, con sólo el abecedario, los músicos con las notas musicales, los investigadores con los microscopios y otros tantos creadores, nos podrían decir el deseo incoercible de crear algo grande y el placer que sintieron al ver realizada su obra.

        Y si cualquiera de nosotros siente el deseo de plantar una semilla, verla germinal y seguir su desarrollo año tras año hasta verla convertida en un corpulento árbol. ¿A que lo sentiría como algo grande y propio?.

       Pues Dios TRINO debió de sentir tal deseo de CREAR algo que saliera de su y ESENCIA, como es el AMOR, que nos creó tan a su imagen semejanza, que pudiéramos llegar  a ser como Dios y así satisfacer el deseo oculto que tuvieron nuestros primero padres de ser como Dios, así se lo hizo creer Satanás y nosotros hemos heredado queriendo ser algo grande en este mundo.

       Esto último no es "Teología-Ficción" sino una misteriosa, maravillosa, poco creía y  sobre todo aceptada y deseada  realidad.

      El que haya intentado y VIVIDO en la tierra como VIVIÓ Jesucristo, llegaría a formar parte integrante de la Santísima Trinidad, y entonces sería:

     Dios UNO en esencia y MÚLTIPLE en personas. 


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