El que más o el que menos tendrá grabado en su vida la
huella agradable o desagradable de un buen o mal ejemplo o testimonio.
¿Por
qué han influido en nuestras vidas las buena o mala compañías, los buenos o
malos consejos y sobre todo las buenas o malas lecturas?
Porque somos monos de imitación, apenas tenemos
personalidad, vivimos esclavos de las modas y a todos nos gustaría ser famosos;
pero ¡¡¡Qué pocos ser santos!!!?
Ya que apenas abrimos el Evangelio para leer las PALABRAS
QUE DAN VIDA ETERNA, leamos, al menos en este artículo algunos testimonios que
nos aumentarán la FE ,
la ESPERANZA
y el AMOR a Dios y a los demás, como
Principio y Fundamento de vida y progreso, dejando de leer lo inocuo y escuchar tanta palabrería.
San Pablo dijo y
VIVIÓ
Mi VIVIR es CRISTO
. Vivo yo, ya no SOY YO, es CRISTO quien vive en mi
Deseo
MORIR para estar con CRISTO.
Si
es menester gloriarse, aunque no conviene, vendré a las visiones y revelaciones del Señor:
Sé
de un hombre en Cristo que hace catorce años – si en el cuerpo, no lo sé, si
fuera del cuerpo, tampoco lo sé, Dios lo sabe – fue arrebatado hasta el tercer
el cielo, y sé que este hombre – si en el cuerpo o fuera del cuerpo, no lo sé,
Dios lo sabe – fue arrebatado al paraíso y oyó palabras inefables que el hombre
no puede decir.
De
tales cosas me gloriaré, pero de mí
mismo no he de gloriarme, sino de mis flaquezas”
Todo esto y mucho más pronunció y VIVIÓ San Pablo que sólo OYÓ en el camino de
Damasco la VOZ de
Jesucristo a quien no VIÓ como los demás apóstoles.
Santa Teresa decía:
Vivo
sin VIVIR en MI y tan ALTA VIDA espero, que MUERO porque no muero
San Juan de la
Cruz sintetizó su vida:
Olvido
de lo criado,
memoria del Criador,
atención a lo interior
estarse amando al Amado.
Cristina Onassis antes de suicidarse dijo:
Soy
tan pobre tan pobre que sólo tengo dinero.
Todos
estos testimonios podrían ayudarnos a vivir nuestra vida de un modo muy distinto al que se vive,
Si pudiera servir de algo mi testimonio para aumentar y
fortalecer esa FE y AMOR a JESUCRISTO, que lea, si es que ya no los ha leído,
mis artículos
“Yo
no he VISTO a Dios, pero creo que LO he SENTIDO” publicado el 7 de Marzo 2012
Y
este otro: “Me siento como un CARTUJO de andar por casa y un JESUITA
extramuros” publicado el 8 de Diciembre 2014..
Para
los que no los hayan leído, haré ahora el siguiente resumen:
Puedo
decir que hace 72 años o sea en 1.942 que recuerdo como si me hubieran sucedido
ayer, en el que Dios se me MANIFESTÓ un domingo camino de mi casa después de
haber estado en misa y comulgado, cuando
de repente y como en un flas SENTÍ que Dios estaba dentro mí. ¿Cómo fue? no lo
sé,
Otro
domingo al salir de un partido de futbol entré en la capilla de la Virgen de mi pueblo para
hacer la visita que hacía todos los días al Señor en mi Parroquia.
Me
arrodillé en el último banco, distraído y con prisas porque mis amigos me
esperaban para ir al cine,
Al
ver el SANTÍSIMO en exposición menor, SENTÍ que allí estaba Jesucristo PRESENTE.¿Cómo
fue? No lo sé.
Ante
el miedo de que mi hermana mayor no
saliera de una operación con su desplazamiento a Madrid para operarse, le dije
al Señor en una de esas visitas diarias:
“SEÑOR,
si mi hermana se salva y TÚ me llamas, TE seguiré”
Se
que Jesús me escuchó desde el Sagrario porque me cogió la Palabra
Mi
hermana se salvó, yo olvidé por completo mi promesa, que sólo recordé cuando
murió esa hermana y yo estaba casado y con tres hijas.
Yo
sentí mi vocación al leer el Kempis o Imitación de Cristo y “Valientes” y “Dios lo quiere” sin que
influyeran para nada, ni mi promesa ni las manifestaciones de Dios, que jamás
sentí ni siquiera las recordé durante mis 14 años de jesuita.
Y Creo que
posiblemente este olvido se debiera al hecho de estar todo el día
imbuido en un ambiente completamente espiritual y de estudio en el que no me
hizo falta echar mano de mis vivencias, como le suele suceder al que estando
bien alimentado no necesita usar sus reservas,
Ahora
como solo se respira ateismo, agnosticismo, laicismo y anticlericalismo, no
tengo más remedio que vivir de mis vivencias y si cuando era Jesuita me decía:
“Jesucristo es mi RAZÓN de ser”, ahora puedo decir “Mihi vivire Christus est”
Mi VIVIR es Cristo” o sea intento estar el mayor tiempo posible en SU presencia,
al menos con el pensamiento.