¿CÓMO COMSEGUIR UN GOBIERNO JUSTO Y ESTABLE?

     Cuando Izquierda y Derecha acepten que gobierne el partido más botado y aun siendo mayoria, aceptara un porcentaje del otro partido en ese gobierno, habremos conseguido un gobierno justo y estable.

     
     Que es lo que hicieron, más o menos, nuestros mayores haciendo una transición ejemplar que nos han dado estos años de progreso y bienestar porque olvidaron odios, memorias históricas y partidismos

         ¿Vamos a dejar pasar una oportunidad de reforzar esa transición perfeccionándola sin necesidad de hacer cambios, sólo por el hecho de cambiar sin saber a qué y recordando las palabras, que más o menos, pronunció José Bono, que el partido se tendría que renovar incluyendo en su programa algo del cristianismo cuando ahora, ni siquiera se le da a Dios el derecho a la vida, negando su existencia? 

          ¿Seríamos capaces de aceptar un cambio de tal calibre, sin habernos consultado a todos  los que queremos ser españoles y no por los votos de los que no quieren ser españoles?  

         Recuerdo que cuando iba a la escuela pública y sin crucifijos, por el 1.936, mis compañeros socialistas me decían que Jesucristo fue el primer socialista y llevaban razón porque Jesucristo fundó la Iglesia, cuyo programa es:

         La LIBERTAD ya que nadie está obligado a bautizarse, ni castiga a quien no cumpla  sus normas, no cobra impuestos ni sus jóvenes se ordenan de sacerdotes para tener un empleo seguro y bien remunerado.

         La IGUALDAD porque todos somos iguales ante Dios y ante los demás, hay ricos, pobres, inteligentes, ignorantes y de todas las razas y condiciones y tan iguales que cualquiera puede llegar a ser Papa

         La FRATERNIDAD porque si en el Primer Mandamiento que a nadie obliga, es Amar a Dios, y el segundo tan importante como el primero es Amar al prójimo como a uno mismo.

         Y por eso muchos miembros de la Iglesia se dedican exclusivamente a cuidar, dirigir por el buen camino, a todo el que quiera seguirlo y en especial a los pobres y más necesitados en su propio país y en países del tercer mundo viviendo una vida con estrecheces y contagiándose de enfermedades a cambio de nada.

         Cuando Jesucristo le respondió a Caifás, que le había preguntado sobre sus discípulos y doctrina, que él siempre había predicado en público y que por lo tanto les preguntara a ellos, un alguacil, le dio una bofetada y Jesús le dijo: si hablé mal,  muéstrame en qué, y si bien, ¿Por qué me PEGAS?

         ¿Podría preguntar hoy día Jesucristo, que es Dios, a los que le odian ¿Qué os hago yo de malo, que no me queréis ver ni CRUCIFICADO?