Piedra angular es la que estando situada en una esquina de la edificación, ensambla o junta dos muros o paredes que se construirán en distintas direcciones.
Dios tuvo que hacer de piedra angular para saber y controlar los dos caminos que elegiríamos, siendo libres, al ser arrojados del Paraíso.
Nada más empezar la andadura fuera del paraíso Caín mató a su hermano Abel porque a Dios le fueron más gratas las ofrendas de Abel que las de sullas, con lo que ya quedaron marcados los dos caminos, de BUENOS y MALOS, casi siempre enfrentados.
Como Dios no podía desde allá arriba conseguir que buenos y malos camináramos, al menos unidos y no enfrentados, decidió bajar a la tierra, sin dejar de ser Dios y al tomar nuestra naturaleza, nos enseñara con sus palabras y hechos que sólo podríamos ser BUENOS aun teniendo en contra los MALOS, si aceptábamos y cumplíamos cuanto nos dijera y lo ejemplarizara como lo hizo.
Por eso, Jesucristo para que fuéramos BUENOS de verdad, dijo:
Yo soy el CAMINO la VERDAD y la VIDA.
Sin MÍ no podéis HACER NADA.
APRENDED de MÍ que soy MANSO y humilde de corazón; pero para eso:
Habría que poner la otra MEJILLA en lugar de VENGARSE.
Habría que poner la otra MEJILLA en lugar de VENGARSE.
Hacer el BIEN a los que nos ODIAN.
BENDECIR a quienes nos MALDICEN
Y PERDONAR hasta SETENTA veces siete.
Todo esto que dijo Jesucristo lo cumplió y lo rubricó desde la Cruz , prometiendo al buen ladrón el paraíso y diciendo: Padre PERDÓNALOS porque no saben lo que hacen y el Centurión no tuvo más remedio que exclamar: Verdaderamente este es el Hijo de Dios.
Lo más triste y lamentable de todo esto es que los que no creen en Dios ni en Jesucristo ni en su iglesia y por lo tanto para ellos no existe el pecado, tiene toda la libertad del mundo para vivir como les apetezca, siempre que respeten la libertad de los demás y no odien, persigan ni martiricen a los que ni opinan ni viven como ellos.
Que Dios nos libre de los que nos quieran gobernar si para ellos no EXISTE ni DIOS ni LEY.
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