martes, 3 de noviembre de 2020

¿CÓMO SON LAS SIETE TABLAS SALVADORAS DE LA VIDA?

 


         Si los gatos tienen siete vidas, nosotros, para no ser menos, también tenemos siete tablas que nos podrán mantener a flote de los muchos quehaceres o problemas de la vida para llegar a la vida ETERNA.

         1- Nada más nacer nos agarramos a los pechos de nuestra madre o al biberón que nos ofrezcan y con el Bautismo adquirimos derecho a que Dios sea siempre nuestra tabla salvavidas

         2.- En la niñez sólo nos sentimos seguros y amparados en los brazos de los padres o personas de plena confianza, en Dios y en el ángel de la Guarda, si así nos lo han enseñado y de vez en cuando, nos deberían decir: "No hagas eso porque Dios te castigará" como se decía antaño.

        3.- En la Pubertad aunque ya empezamos a sentirnos más independientes, siempre estará el amigo íntimo que nos puede marcar para el bien o para el mal y nos puede ilusionar empezar nuestra intimidad con Dios, si hacemos la Primera Comunión.

        4- En la adolescencia, el amor platónico y las diversiones nos salvarán del atosigamiento estudiantil y Dios podrá ayudarnos, si así se LO pedimos, de no caer en las muchas tentaciones apetitosas.

5- En la madurez buscar un empleo, encontrar la media naranja, crear una familia, intervenir directa o indirectamente en lo social y político y sobre todo embarcarse en la BARCA de Pedro, viviendo sus principios y normas y que aunque esté compuesta de muchas tablas y a veces no muy sanas, están bien ensambladas y pilotadas por hombres; pero siempre dirigida por Dios y por eso aguanta todas las tempestades  y torpedos enemigos. 

6- En la Jubilación, para  seguir a flote en medio de la ociosidad, la soledad, el aburrimiento, seguirá cuidando la familia, habrá que buscar una ocupación, remunerada o gratuita y sobre todo, seguirá REMANDO  dentro de la Barca de Pedro, o sea en la IGLESIA puesto que bien claro Jesucristo le dijo: "Tu eres Pedro y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia. 

7- En la vejez, para no sentirse viejo y por lo tanto inútil y hundido en el mar de achaques, nos agarremos, ahora más que nunca a la CREENCIA de que estando al lado de Jesucristo como hermano mayor y de la Virgen como Madre NOS SALVAREMOS.  

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