¿POR QUE TODO TIENE ARREGLO MENOS LA MUERTE?

 

         Aunque esto suele decirse, no es verdad porque precisamente la muerte lo arregla todo definitivamente, para  bien o para mal y por toda la eternidad, Se crea o no se crea.

         Para el no creyente, puede que sea verdad que todos los problemas de este perro mundo tiene arreglo menos la muerte, pero

    

        ¿Y si después de la muerte existe algo que tiene mucha relación con la vida anterior?

         Para el verdadero creyente, la muerte lo arregla todo porque se le habrán solucionado todos los problemas, sufrimientos, angustias, enfermedades etc. y las PERSPECTIVAS no pueden ser mejores porque no habrá PERDIDO la vida sino que se habrá TRANSFORMADO a lo divino.

         ¿Se puede esperar una VIDA MEJOR que es lo que todos ansiamos?

         Para poder esperar una vida mejor, habrá que pensar vivir como decía Santa Teresa que la vida es una MALA NOCHE pasada en una MALA POSADA, y  si encima se ha tenido la suerte de disfrutar de una  buena vida, lo que venga después será INFINITAMENTE mejor.

         Pero ¿Por qué la muerte es un trago tan difícil de tragar?

         Como esta pregunta, sólo nos la podría dar Dios y la quisiéramos recibir “viva voce”,  nos la está dando no de PALABRA que se la puede llevar el viento sino que  nos lo está diciendo con los HECHOS y los hechos son tozudos.

 

          La respuesta más contundente nos la dio Jesucristo, que siendo Dios, pidió a su Padre, en el Huerto de los Olivos, que le  librara del cáliz que tendría que beber y desde la cruz LE preguntó que por qué le había abandonado y así murió.      

         Ni Dios se libró del trago de la muerte para poder RESUCITAR.

.Todas las grandes obras o transformaciones requieren mucho trabajo, a veces oculto, como serían las ideas, los  proyectos etc. para verlas realizadas.

Una cosa tan diminuta y casi desapercibida como es una semilla, tiene que enterrarse y pudrirse para convertirse con el tiempo en un corpulento árbol..

Pues nuestra VIDA  en este mundo, que  es la gran OBRA  de la  creación de Dios, no es  ni más ni menos que una SEMILLA que tiene que vivir casi enterrada en el ajetreo de esta vida para PUDRIRSE mediante enfermedades problemas y toda clase de infortunios, que la purifiquen y la transformen para poder volver a las manos de Dios, de donde salieron y así al final, .se realice en cada uno de nosotros  la gran OBRA creadora de Dios.

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