Luzbel, al verse tan inteligente, tan bello y casi tan poderoso como Dios, le cegó su soberbia y se autoproclamó Dios y como Dios no puede haber más que uno, automáticamente se convirtió en un anti-Dios.
Si digo que hay que tener fe y creer que existe el día y la noche, se reirán.
Si digo que hay que creer en Dios y en el demonio, me llamarán lo que quieran; pero nadie me lo podrá negar y menos demostrar que no existe ninguno de los dos.
La noche y el día la palpamos y a Dios y al demonio los palpamos en todo cuanto sucede a nuestro alrededor, bueno o malo.
La mano del maligno y sus secuaces, no sólo la vemos sino que, para nuestra desgracia, la sufrimos.
En este mundo parece que el que reina es Satanás y sus seguidores. Al menos son los que hacen más ruido y molestan.
Algunos creen más en el Diablo que en Dios.
, Véanse la cantidad de sectas satánicas que pululan por todo el mundo.
Por eso Jesucristo le dijo a Pilato que su Reino no era de este mundo y efectivamente así es, y por eso tiene tan pocos amigos y buenos seguidores, porque aún estos, de vez en cuando, también le encienden una vela al Diablo.
¿Cómo es posible que haya habido personas, y los hay, muy inteligentes, sabios y poderosos que hayan ido y van contra Dios y sus leales seguidores con actuaciones más propias de Satanás?
. Sencillamente porque en su soberbia se han creído y se creen dioses, al menos en esta vida.
El auténtico Reino de Dios está en otro mundo, al cual, queramos o no, tendremos que ir para vivir o malvivir ETERNAMENTE
No hay comentarios:
Publicar un comentario