viernes, 16 de abril de 2021

AUNQUE EL PROGRESO TERRNAL TENDRÁ SU FIN, EL CELESTIAL SERÁ ETERNO.

 

          No cabe duda que nuestro Progreso Científico, Social y de Bienestar avanza a una velocidad vertiginosa sin saber hasta dónde podríamos llega

              El Dios PADRE cuando  terminó de crear todo el Universo, tuvo que decir en Plural
    
           HAGAMOS, al hombre a nuestra imagen y semejanza, ya que  el  HIJO y el ESPÍRITU SANTO tendrían que intervenir en nuestras vidas.

            Entre las muchas  civilizaciones idólatras, El PADRE escogió a Israel como pueblo preferido, marcándole el recto camino con sus Mandamientos, que al no ser cumplidos:

            Los castigó con el Diluvio, la Torre de Babel, aniquiló Sodoma, perdonó Nínive, los sacó de la esclavitud de Egipto, anduvieron  40 años por el desierto hasta llegar a la tierra prometida y siguieron incorregibles.

            Ya en aquellos tiempos hubo profetas que anunciaron que el Dios HIJO, se haría HOMBRE  y sin más poder que el dejarse crucificar para meternos en vereda, cosa que a trancas y barrancas y silenciosamente  está consiguiendo, en parte,  porque muchos  siguen  siendo  más ANIMALES que Racionales.

            En lo ANIMAL, o sea en todo lo material o corporal  estamos progresando hasta el extremo de que podamos sentir  hastío de tanto lujo y bienestar, que nos aburrirían  como hacemos con los juguetes de niño, cuando descubrimos el AMOR.

          ¿Podríamos profetizar, como se hizo en el Antiguo Testamento,  que con la venida del DIOS Espíritu Santo, al posarse en la cabeza de cada uno  con una lengua de fuego y acariciados por un suave viento, pudiéramos descubrir y gustar el AMOR a DIOS y a los DEMÁS, muy por encima de todos los demás  amores, como el último y único PROGRESO tan deseado por la Santísima Trinidad y que es lo que haríamos ETERNAMENTE?

            Así, todo lo Creado por el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo.

 No  habría sido un fracaso, sino una obra GENIAL  por la UNIÓN de lo Humano con lo DIVINO

            ¿Se podría  pensar que este final del Progreso profetizado, estaría en contra de lo que Jesucristo dijo?

            "Después de la tribulación de aquellos días, se oscurecerá el sol, y la luna no dará su luz, y las estrellas caerán del cielo, y los poderes del cielo se conmoverán"

            "Cuidad que nadie os engañe, porque vendrán muchos en mi nombre y dirán: Yo soy el Mesías, y engañarán a muchos"

            "Oiréis hablar de guerras; pero no os turbéis, porque es preciso que esto suceda, más no es aún el fin"

            Pero también dijo:

            " De aquel día y de aquella hora nadie sabe, ni los ángeles del cielo ni el HIJO, sino solo el Padre"

            Luego, ¿Cabría la posibilidad de que el final del mundo sea por la venida del Espíritu Santo, que por ser la Tercera Persona de la Trinidad, más ignorada y que apenas ha intervenido, tenga la llave del CIERRE de todo lo CREADO, como el Padre tuvo el PRINCIPIO de toda la  CREACIÓN?
           

No hay comentarios: