Todos sabemos que en el mundo mueren
de hambre millones de seres humano
Nadie, que yo sepa, se suicida aunque esté muerto de hambre y sin embargo, muchos que viven en la abundancia, matan y se matan.
El cuerpo, aunque parezca mentira,
aguanta lo que le echen.
El ESPÍRITU más refinado e importante,
al no poder soportar los ataques continuos del cuerpo, al que sólo le han
enseñado a comer y beber porque mañana moriremos, se siente tan postergado y
tan débil que no puede luchar contra las depresiones, las angustias, los enfrentamientos familiares, los
remordimientos etc, y obnubilada la razón, MUERTO el espíritu, el cuerpo se
arroja al vacío.
Se hacen esfuerzos muy loables para
erradicar del mundo el hambre del cuerpo. ¿Qué se hace para la del Espíritu?
En esta sociedad atea y laicista en la
que por principios ideológicos se niega la existencia del Espíritu, se fomenta
de tal modo la buena vida, que el hombre tan proclive al desenfreno en todo lo
que sea placer, se mete de bruces en el libertinaje, en el sexo descontrolado, en la droga, en la Pederástia, Violencia de Género, en el Acoso Sexual y ya hasta en el el Suicidio de toda una familia.
¿Hasta dónde vamos a llegar?
Me temo que hasta que no se EDUQUE por activa y por pasiva en los Principios Morales y Religiosos, o sea en el Santo Temor de Dios que es el Principio de la Sabiduría, y como para muchos después de la muerte no hay nada y la vida presente es un infierno, seguirán queriendo librarse de ese infierno, matando y matándose
Si investigamos las continuas Violencias de Género, comprobaremos que, por lo menos el que se suicida después de haber matado a su pareja, no se dice esposa, es porque no CREE en el más ALLA. y si supiéramos los motivos de tales homicidios y suicuidios, sabriamos los motivos inconfesables de los enfrentamientos que habrián tenido solución con un comportamiento Humano-DIVINO.
¿Hasta dónde vamos a llegar?
Me temo que hasta que no se EDUQUE por activa y por pasiva en los Principios Morales y Religiosos, o sea en el Santo Temor de Dios que es el Principio de la Sabiduría, y como para muchos después de la muerte no hay nada y la vida presente es un infierno, seguirán queriendo librarse de ese infierno, matando y matándose
Si investigamos las continuas Violencias de Género, comprobaremos que, por lo menos el que se suicida después de haber matado a su pareja, no se dice esposa, es porque no CREE en el más ALLA. y si supiéramos los motivos de tales homicidios y suicuidios, sabriamos los motivos inconfesables de los enfrentamientos que habrián tenido solución con un comportamiento Humano-DIVINO.
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