Nunca lo podríamos conseguir si sólo se pudiera hablar con Jesucristo mediante el diálogo que requiere la presencia entre dos personas.
Pero si CREEMOS de verdad que Jesucristo está con cada uno de nosotros en la intimdad, LE podríamos preguntar cuando nos diga:
- “Venid a mi todos los que andáis angustiados con trabajos y cargas que yo os ALIVIARÉ.”
- ¿Cómo me aliviarías cuando la carga
me oprima y surja el temor de que no me alivies porque no me conviene y los
problemas, me atormentan como si fueran Cruces Fantasmas?
- Piensa que si se cumple mi voluntad, comprobarás que
al final habrá sido, en el fondo, la tuya. Y esos temores o Cruces Fantasmas,
sería el TRIBUTO que habrías pagado para que no se convirtieran en REALES,
aunque yo no lo llamaría tributo, sino una OPORTUNIDAD de haber estado
CONFIANDO plenamente en MÍ. Y si estás conmigo. ¿Qué puedes temer?
-Y si me dices que aprenda de TI que
eres manso y humilde de corazón, Sabes
Señor que muchos piensan que es ridículo que digas lo que dices, siendo Dios
como eres porque en este mundo, yo sería un corderito rodeado de
lobos feroces.
- Si te devoran, también lo hicieron
conmigo y conviene que sepas que mientras no te devoren, te dejarán tranquilo
si eres manso y humilde de corazón no despreciando a nadie y tolerante con
todos.
- Si realmente quieres ser como yo. ¿Podría ofrecerte
mayor
intimidad si te
digo:”Si comes mi CARNE y bebes mi
SANGRE, morarás en MÍ y YO en ti?
- ¿No te parece Señor, muy duro e incomprensible que
para tener intimidad contigo, tenga que COMERTE en un trocito de PAN que dura
unos segundos?
- Llevarías razón si el que me hiciera tal
consideración fuera un creyente de usar y tirar; pero si tu quieres mi
intimidad como lo más valioso de este mundo, tendrás que ser consecuente con tu
FE que te dice que YO ESTOY día y noche en la EUCARISTÍA y que cuando
me recibas en ese trocito de PAN, recibes nada menos que al Dios que ha CREADO
todas las maravillas del mundo y que por lo tanto tengo el PODER y el DESEO de
seguir contigo todo el día, si así lo piensas.
- Y si Vives sin vivir en ti y tan alta vida esperas,
que mueres porque no mueres y sigues los siguientes consejos de mi sierva
Teresa de Jesús:
Nada te turbe
nada te espante
todo se pasa
Dios no se muda
la paciencia que
todo lo alcanza
quien a Dios tiene
nada le falta
SÓLO DIOS BASTA.
-Y si estás en el atardecer de la vida y te sientes en
el corredor de la muerte, sabiendo que sólo te examinaré en el AMOR con el que
hayas vivido, vive lo que te quede de vida como mi siervo Juan de la Cruz:
Mi alma
se ha empleado
y todo mi caudal en su servicio
ya no guardo ganado
ni ya tengo otro oficio
que ya SOLO en AMAR es mi ejercicio.
- Cuando llegues a “Desear morir para estar conmigo”
“Cupio dissolvi et esse cum Christo”, como lo deseaba mi siervo Saulo, habrás
con seguido disfrutar ya en la tierra de un pedacito de CIELO.
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