viernes, 2 de noviembre de 2018

¿QUÉ OPINAMOS DEL PODER?

                              
          A esta pregunta, la gente de  la calle, podría dar las siguientes   respuestas, entre otras muchas.

         "La unión de unos ambiciosos ignorantes"
         “La carabina de Ambrosio”
         “La Conjura de los Necios”
         “La casa de Tócame Roque”
          “ La  Flauta de Bartolo”
         “ El  Cachondeo Padre”
         “La reunión de Cínicos”

Estos posiblemente, estarían  confundiendo el PODER con los que lo que EJERCEN, pero el poder es algo más importante.

Alguno más sensato y queriendo pasar por entendido diría:

El Poder es La DEMOCRACIA, al cual, alguien que lo oyera le respondería

         Exacto; pero con matices, porque la Democracia no es el poder, es la que mediante votaciones, muchas veces, manipuladas y con engaños, designa al que puede ejercer el poder; pero nunca que lo TIENE, que es muy distinto del poder en sí.

            Alguien muy sensato, cosa poco frecuente y atreviéndose  a meterse en camisa de once varas o en un berenjenal, le diría:

El PODER es un DON bajado del CIELO, que muy pocas veces recae en la persona más adecuada  para ejercerlo con sabiduría y autoridad que ,muchas veces, no acompaña al poder y entonces se convierte en autoritarismo, ignorando que no tendría ningún poder si no lo hubiera sido dado de los Alto, como le respondió Jesucristo a Pilato cuando éste le dijo que si no sabía que tenía poder para soltarle o crucificarle.

Cosa que posiblemente esté sucediendo ahora cuando nos quieren gobernar quienes dificilmente puede recibir el PODER de un DIOS condenado por ellos, sin pruebas, a la  inexistecia.

         La democracia, lo único que hace y no siempre muy bien, es designar a quién le corresponde recibir y ejercer ese maravilloso don, que es una carga, si se ejerce con auténtica justicia, equidad y sabiduría, para lo cual se necesita mucha ayuda de Dios.

        Algunos, por el hecho de que Jesús dijera un día que:

      “Hay que dar al Cesar lo que es del Cesar y a Dios lo que es de Dios”, 

        Quieren tener PODER para hacer con las cosas de Dios, lo que le venga en gana, o PREVARICANDO, como lo hizo Pilato condenando a Jesucristo, cuando su propia mujer le dijo que era JUSTO.


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