El Camino, la Verdad y la Vida, son tres
circunstancias terrenales para conseguir participar de las divinas
Jesucristo,
si dijo, siendo hombre, que él era El Camino, la Verdad y la Vida, fue porque
era Dios y como Dios es uno en esencia y trino en persona, las tres divina
personas son para nosotros el Camino, Verdad y la Vida
Porque el Padre es el que nos da la salida del camino que
tendremos que recorrer para llegar a la meta final.
El Hijo que como hombre vivió entre nosotros, nos diseñó el camino correcto y sigue entre
nosotros para ayudarnos a recorrerlo para llegar a la meta.
Jesucristo también es la Verdad; pero no una verdad
cualquiera, sino la única verdad que permanece y no como otras tantas verdades
que son mentiras que matan
Al que se deja engañar, porque es tomado por tonto y al que
miente porque nadie le aprecia y es esclavo de sus propias mentiras. “ La
Verdad os hará libres” como dijo Jesucristo.
Cuando Pilato le dijo a Jesús: ¿Luego tú eres rey?
?
Tú dices que soy rey, YO para esto he nacido y para esto he
venido al mundo, para dar testimonio de la VERDAD.
Todo
el que es de la verdad, OYE MI VOZ.
Pilato
dijo ¿Y qué es la verdad?
Jesucristo no respondió porque Él era la VERDAD PERSONIFICADA y por lo tanto INDEFINIBLE.
Jesucristo no respondió porque Él era la VERDAD PERSONIFICADA y por lo tanto INDEFINIBLE.
Si Jesucristo es Camino, Verdad, también es la VIDA porque
si no hubiera DADO SU VIDA por nosotros no podríamos alcanzar la VIDA ETERNA.
El Espíritu Santo, siendo la tercera persona de la Trinidad, se
convierte en protagonista, porque Jesucristo le dijo a Nicodemo:
“El que no naciere de agua y del
ESPÍRITU, no podrá entrar en la VIDA ETERNA”.
Luego nosotros, sólo podremos conseguir la filiación divina cuando se nos bautice
En el Nombres del PADRE del HIJO y del ESPÍRITU SANTO
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